Encabezando Ranking Parlamentario: Alto Compromiso con Democracia y Ddhh

En este cuatrienio, el Observatorio Parlamentario destaca la aprobación del Estatuto de Roma que crea la Corte Penal Internacional, y la Ley sobre Información, Orientación y Prestaciones en materia de regulación de la fertilidad que permite la distribución de anticonceptivos de emergencia en el sistema público de salud. Ambas iniciativas son un paso adelante en el reconocimiento de los derechos humanos de mujeres y hombres.
Se valora también la ratificación del Convenio de la OIT sobre pueblos indígenas y tribales: y se espera la pronta adecuación de la normativa chilena a dichos compromisos internacionales, como el reconocimiento constitucional a los pueblos indígenas pendiente en el Senado- y la implementación de procesos de consulta en medidas que les afecten.
En el período 2006 2009, no se avanzó en la aprobación de la ley que establece medidas contra la discriminación: pendiente en el Senado y donde no se aprecia voluntad política para su discusión, pese a las diversas recomendaciones del sistema internacional de derechos humanos. El Observatorio insta a la Comisión de Constitución del Senado a retomar su discusión. Las iniciativas de ley sobre uniones de hecho y pacto de unión civil, y de participación política equilibrada de hombres y mujeres también requieren ser apoyadas por los legisladores en el período iniciado.
«Esto claramente pone en cuestión el trabajo del Congreso en temas que son fundamentales para el reconocimiento y respeto de los derechos de hombres y mujeres. Al menos dos de estas iniciativas son compromisos del gobierno del Presidente Sebastián Piñera, y esperamos que a la brevedad, tanto el Ejecutivo como el Legislativo, activen el trabajo sobre ellos, declaró Carolina Carrera vicepresidenta de Corporación Humanas y coordinadora del Observatorio Parlamentario.
El debate sobre la iniciativa ciudadana de ley tampoco prosperó en estos cuatro años. Ello refleja el poco reconocimiento que existe desde el Estado a la participación ciudadana, a la que se excluye de la formulación de leyes y no se incorpora debidamente al debate legislativo.
«La presencia de organizaciones que fiscalicen el debate legislativo y el desempeño de los y las parlamentarias es escasa. Desde el Congreso existe un limitado reconocimiento al trabajo de las organizaciones de la sociedad civil en materia legislativa, y esto a todas luces es una debilidad del Poder Legislativo en tanto espacio donde se deberían desarrollar los debates de interés público para chilenos y chilenas. Lamentablemente, hemos constatado en estos cuatros años de seguimiento, que el sector privado es el más escuchado en el Congreso, sostiene Carolina Carrera.
En materia de profundización democrática, los avances del Poder Legislativo no son alentadores. Si bien se valora la aprobación de la Ley sobre Acceso a la Información: así como la reforma constitucional sobre Transparencia, Modernización del Estado y Calidad de la Política: persisten desafíos importantes.
Durante el período analizado, la actual alianza de gobierno rechazó las iniciativas que permitían el voto de los ciudadanos chilenos en el extranjero y la eliminación del impedimento que pesa sobre los dirigentes sindicales para su participación en elecciones parlamentarias. La oposición a modificar el sistema electoral vigente también tuvo como protagonistas a los parlamentarios/as de la UDI y RN, lo que se espera sea revertido.
Si a lo anterior se suma el rechazo al proyecto que limita la reelección de parlamentarios: la oposición del Senado a transparentar la función del Poder Legislativo a través de procesos de redición de cuentas: así como la falta de debate en torno a la paridad, podemos establecer que «estamos aún lejos de contar con un Poder Legislativo dispuesto verdaderamente al fortalecimiento de la democracia y a la renovación de la clase política, limitando con ello canales de participación e inclusión de otros actores en el ejercicio y la representación en espacios de poder político observa Patricia Cardemil, Directora de Fundación Ideas.
En sus balances, el Observatorio Parlamentario ha incorporado también un Ranking del compromiso de los y las congresistas, sobre la base de un conjunto de iniciativas monitoreadas . En el período 2006 2009, ninguno de los 38 senadores y senadoras tuvo un alto nivel de compromiso con los DD.HH. y la democracia. Bajo la categoría «sin compromiso, calificaron el ex senador Jorge Arancibia, y el reelecto Juan Antonio Coloma, ambos de la UDI
En la Cámara Baja fueron 11 los diputados y diputadas con un «alto compromiso: la electa senadora Isabel Allende, y la actual Presidenta de la Cámara Alejandra Sepúlveda, Denise Pascal, Pedro Araya, Alfonso De Urresti, Marcelo Díaz, Gonzalo Duarte, Francisco Encina, Felipe Harboe, José Miguel Ortiz, y Marcelo Schilling.
Fuente: http://www.humanas.cl/?p=1259